En este nuevo Primero de Mayo, la APDH hace llegar un cálido saludo a todas las personas que trabajan y a las organizaciones sindicales que las representan defendiendo sus intereses y promoviendo sus derechos
En este nuevo Primero de Mayo, la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) hace llegar un cálido saludo a todas las personas que trabajan y a las organizaciones sindicales que las representan defendiendo sus intereses y promoviendo sus derechos.
El Día Internacional del Trabajador y la Trabajadora nos encuentra en un angustiante momento político toda vez que el gobierno nacional y sus aliados pretender legislar en desmedro de la protección laboral programada en la Constitución Nacional y los Tratados Internacionales de Derechos Humanos incorporados a ella, protección que fuera reconocida por la Corte Suprema de Justicia de la Nación diciendo que las personas que trabajan son sujetos de preferente tutela constitucional.
Desde ésta Asamblea Permanente por los Derechos Humanos afirmamos que las modificaciones a proponer en el futuro inmediato deben orientarse en el sentido de ampliar la protección de las personas que trabajan, siguiendo el criterio resuelto por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, cuando afirmó que el desarrollo progresivo de un país debe medirse en función de la creciente cobertura de los derechos económicos, sociales y culturales sobre el conjunto de la población, teniendo presente el imperativo de la equidad social.
Por ello, en éstos tiempos difíciles, expresamos nuestro compromiso en acompañar las luchas sindicales y sostener que la legislación laboral siempre debe evolucionar en el sentido más favorable a las y los trabajadores.
¡Viva la clase trabajadora!
¡Viva el Primero de Mayo!